¡Elí, Elí!, ¿lama sabactani?

¡Elí, Elí!, ¿lama sabactani?- Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has desamparado?

P: ¿Por qué Dios abandonó a Jesús en la cruz? He escuchado que comúnmente se enseña que fue porque Jesús se volvió pecado por nosotros y Dios no puede soportar el pecado. ¿Es eso cierto?

R: Nosotros no creemos que Dios haya abandonado a Jesús en la cruz. El siguiente texto responderá esa pregunta con mayores detalles.

Buscaremos uno de los versículos más difíciles de las escrituras bíblicas. Ésta es una de las cosas de las que habló Jesús mientras estaba siendo crucificado, la cual es comúnmente malentendida.

Si vamos a entender la vida y ministerio de Jesucristo, lo que hizo, lo que alcanzó, sus metas, y su corazón para con la gente de Dios, entonces necesitaremos entender que dijo y porque lo dijo y ese es ciertamente el caso con este versículo difícil de Mateo 27:46.

Mateo 27:46
Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?

La hora novena corresponde a las 3:00 pm.

Los romanos calculaban las horas de forma un tanto diferente a la que nosotros acostumbramos. Ellos calculaban las horas por las guardias en la noche. La primera guardia, la segunda guardia, la tercera guardia y así sucesivamente, y durante el día lo calculaban por horas. Así que la tercera hora del día era las nueve de la mañana, la cuarta hora seria las 10:00 am, la sexta era las 12:00 del mediodía, la novena hora era entonces las 3:00pm.

Mateo 27:45 y 46
(45) Y desde la hora sexta hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena.
(46) Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo:" Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?"

Primero que todo ese "Elí" es la palabra "Eloi" en algunos de los evangelios, y debe ser leído de esta manera aquí. La VRV aquí en Mateo debe ser leída de la misma manera que se hace en Marcos. En Marcos está escrito "Eloi" el cual es arameo pero aquí en Mateo es técnicamente hebreo: "Elí".

Lo que me gustaría compartir contigo hoy es que Jesús no creyó realmente que hubiese sido desamparado por Dios. Él dijo, "Dios mío Dios mío, ¿Por qué me has desamparado? Pero no creía en su corazón que Dios lo hubiese desamparado. Él quería decir algo más, y ese algo mas es lo que vamos a buscar.

Ten en mente que Jesús tenía un gran corazón para con la gente del Señor.

¿Por qué acepto Jesús ser crucificado en primer lugar?

Él le dijo a sus discípulos que podría haber tenido doce legiones de ángeles, él no tenía que ser crucificado. Él fue y oro en el jardín, diciendo que "si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad" (Mateo 26:42).Cristo supo exactamente lo que iba a pasarle, y fue hacia la cruz de igual manera. Ciertamente no pensó que Dios lo abandonaría en manera alguna. A menudo se enseña que Dios abandonó a Jesús porque se volvió pecador.

Dios no abandona a la gente a causa del pecado. Puedo decirte que no estaría dando esta enseñanza si Dios abandonase a la gente a causa del pecado. Las Escrituras son muy claras en que Dios ama a los pecadores y constantemente los busca.

Piensa en tu propia vida ¿cuantas veces has estado en pecado y Dios te cubre de alguna manera? Tanto con una revelación personal o alguna otra cosa, Él se nos presenta en el mundo físico, alrededor de nosotros como una conversación de un amigo que nos llama a volver a Él.

Dios no abandona a los pecadores y démosle gracias por ello. Si vamos a ser imitadores de Dios entonces también necesitamos alcanzar a aquellos que están en pecado. No podemos separarnos de los pecadores. Jesús estuvo siempre rodeado de prostitutas, recolectores de impuestos, y pecadores, tanto así que los líderes religiosos de su momento se escandalizaban por ello.

Jesucristo no fue desamparado en la cruz, pero dijo "porque me has desamparado" y necesitamos entender porque dijo eso.

Mateo 27:47
Algunos de los que estaban allí decían, al oírlo: A Elías llama éste. .

Jesucristo en verdad dijo "Elí, Elí - Dios mío, Dios mío...." Leeremos luego y veremos que estuvo abatido tanto tiempo que estaba deshidratado, su lengua se había secado, él no estaba pronunciando claramente, de tal modo algunas personas pensaron que estaba llamando a Elías.

Mateo 27:48-50
(48) Y al instante, corriendo uno de ellos, tomó una esponja, y la empapó de vinagre, y poniéndola en una caña, le dio a beber.
(49) Pero los otros decían: "Deja, veamos si viene Elías a librarle."
(50) Mas Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu.

Jesús entregó su espíritu. Necesitamos creer esas palabras. Él no fue asesinado por los romanos. Ellos ciertamente llevaron a cabo el proceso, pero fue Cristo quien supo cuando las cosas habían finalizado y entregó su espíritu por ti y por mí. Ese es uno de los más grandes actos de amor (quizá el más grande) que ha tenido lugar en la historia de la humanidad desde la creación misma.

Si queremos entender ese "Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has desamparado?" entonces necesitamos ir a Juan 19, donde Jesús está en la cruz.

Juan 19:28-30
(28) Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, dijo, para que la Escritura se cumpliese: "Tengo sed."
(29) Y estaba allí una vasija llena de vinagre; entonces ellos empaparon en vinagre una esponja, y poniéndola en un hisopo, se la acercaron a la boca.
(30) Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: "Consumado es." Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

Antes en Mateo el texto simplemente dice que el habló otra vez luego de decir "Elí, Elí- Dios mío, Dios mío..." pero no nos cuenta que fue lo que dijo. Sin embargo, aquí el evangelio de Juan dice que sus últimas palabras fueron "¡Consumado es!". Cuando tenemos "Eli, Eli, lama, Sabactani," y "¡Consumado es!" en nuestras mentes, tenemos la posibilidad de entender que hacia Jesús al decir esas frases. De acuerdo con el Tárgum arameo "¡Consumado es!" significa exactamente lo mismo que en la última frase del Salmo 22, y "por qué me has abandonado" es el primer versículo del salmo 22. Este es un punto clave porque si entendemos esto, entonces entenderemos lo que Jesús estaba haciendo cuando dijo esas frases en la cruz.

Jesús amó tanto a la humanidad y quiso tanto alcanzarlos y tocarlos con su amor, su compasión y tanto quiso que creyesen en él, que en su agonía aún estaba buscándolos y citando el primer y último versículo del famoso salmo 22.

Mucha gente conoce este salmo porque el Salmo 22-24, era muy querido y citado por los judíos, así como mucha gente hoy lo conoce: "El señor es mi pastor; nada me faltará." El salmo 23, es amado ahora y lo fue en aquel entonces también. El 22 y el 24 eran leídos juntos con el 23, por el pueblo judío. Todos los salmos fueron queridos. Mucha gente entre el público cristiano conoce el salmo 22, de memoria.

¿Sabes que ocurre cuando alguien te recita la primera parte de algo con lo que estás familiarizado? Es como si yo empezara a cantar "los pollitos dicen..." ¿Tu mente completó la canción y cantó pío, pío pío?

Cuando alguien cita el inicio de alguna cosa es natural seguirlo y lo que vemos en el salmo 22, es que Jesús en su agonía en la cruz estaba buscando entre la gente si había algunos que notaran que él era en efecto el Mesías.

Creo que hay algo importante, realmente importante a lo que debemos prestar atención en Juan.

Juan 19:28
Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, dijo, para que la Escritura se cumpliese: Tengo sed.

¿Qué hay de especial en eso?

Lo especial acerca de esto es que Jesús mantuvo el perfecto control de su mente, de su voluntad. Él fue golpeado, fue torturado, aunque nunca pecó, y el siguió la voluntad de su Padre directamente hasta el final cuando entregó su vida. Él estaba consciente de lo que estaba sucediendo a su alrededor. Estaba en control y concentrado, pero para el mundo exterior él no parecía estar tan en control de sí mismo. Él fue a quien arrestaron y golpearon, crucificaron y torturaron, y parecía como si fuese la víctima. Sin embargo, Jesús estaba en completo control de lo que sucedía.

Ahora vayamos hacia atrás, a la preparación de Jesús para ser arrestado porque sabía absolutamente todo lo que iba a sucederle.

Isaías 52: 14
Como se asombraron de ti muchos --de tal manera fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura más que la de los hijos de los hombres--

¿Cómo ocurrió esta desfiguración? Porque él fue azotado, golpeado y apuñalado. Su cuerpo se hinchó, fue cortado y sangraba sin cesar.

Isaías 53:3 y 5
(3) Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.
(5) Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

Jesús sabía que iba a ocurrirle esto tan seguramente porque esta profecía de Isaías es la palabra de Dios. Además, el trató de enseñar a sus apóstoles acerca de ello. Los apóstoles habían ido a las sinagogas desde que eran niños pequeños. Ellos tenían una idea profundamente inculcada en sus mentes acerca de cómo debía ser el Mesías, y su concepto del Mesías no incluía ser golpeado, torturado, crucificado y asesinado. Recuerden que Moisés escribió: "porque maldito por Dios es el colgado;"(Deuteronomio 21:23) De tal manera, ellos no crecieron con el pensamiento de que estos serían parte de los acontecimientos que viviría el Mesías.

Marcos 10:32-34
(32) Iban por el camino subiendo a Jerusalén; y Jesús iba delante, y ellos se asombraron, y le seguían con miedo. Entonces volviendo a tomar a los doce aparte, les comenzó a decir las cosas que le habían de acontecer:
(33) "He aquí subimos a Jerusalén," y "el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los escribas, y le condenarán a muerte, y le entregarán a los gentiles;
(34) y le escarnecerán, le azotarán, y escupirán en él, y le matarán; mas al tercer día resucitará."

Jesús estaba esperando ser arrestado y entregado a los gentiles para que entonces los soldados romanos le escarnecieran, escupieran, y azotaran, ellos le golpearían y matarían, y tres días más tarde el resucitaría.

Éste no es el único pasaje bíblico donde Jesús advirtió a sus apóstoles sobre esto. Él sabía que iba a ocurrir y sabía en qué periodo de tiempo estos hechos tendrían lugar. Además sabía que él tendría que ser el cordero de pascua que tendría que morir a las 3:00 de la tarde del 14 de Nissan para cumplir la palabra de Dios.

Juan 19, dice: "Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, para que la Escritura se cumpliese..." Aquí el aún está en la cruz, es el momento perfecto para entregar su vida. Jesús estaba en control de la situación, pero para el mundo el parecía una víctima ultimada.

Mateo 26:1-3, y 5
(1) Cuando hubo acabado Jesús todas estas palabras, dijo a sus discípulos:
(2) "Sabéis que dentro de dos días-- se celebra la pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado."
(3) Entonces los principales sacerdotes, los escribas, y los ancianos del pueblo se reunieron en el patio del sumo sacerdote llamado Caifás,
(5) Pero decían: "No durante la fiesta," para que "no se haga alboroto en el pueblo."

Los principales sacerdotes querían asesinar a Jesús. Como estaban conspirando y tratando de atar los cabos dijeron "esperemos hasta después de la pascua, debido a que hay mucha gente aquí en Jerusalén para la pascua y es posible que hayan disturbios."

Si esta parte de su conspiración hubiese ocurrido, Jesús no hubiese podido completar la profecía del cordero de Pascua solo porque el Adversario hubiera querido romper la palabra de Dios.

Aprendimos de Mateo 16, que Judas iba donde el sumo sacerdote para ese entonces o muy cerca de ese momento en ir, y estaba tratando de hacer su parte para que se diese el arresto de Jesús.

Juan 13:25-28
(25) El entonces, recostado cerca del pecho de Jesús, le dijo: "Señor, ¿quién es?"
(26) Respondió Jesús: "A quien yo diere el pan mojado", aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de Simón.
(27) Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: "Lo que vas a hacer, hazlo más pronto [rápido]."
(28) Pero ninguno de los que estaban a la mesa entendió por qué le dijo esto.

Las palabras de Jesús han sido mal traducidas en este texto, y pierden gran parte del impacto de lo que estaba ocurriendo. Jesús sabía que él iba a ser ese chivo expiatorio. Los sacerdotes ya habían dicho que querían arrestar a Jesús y entregárselo a los romanos pero no querían hacerlo durante las fiestas. Ahora, ellos estaban en la última cena y Jesús sabía que era el momento esencial. Jesús probablemente sabía por una revelación que Judas ya había ido donde el sumo sacerdote (lo cual pueden leer en la cronología de Mateo 26). Judas ya había comenzado a trabajar con los sacerdotes de tal forma que pudiesen atrapar a Jesús. Si leemos los comentarios de Linsky o A.T. Robertson, la forma en que Juan 13:27, debe ser traducido es: "lo que estás haciendo, hazlo más rápido".

Jesús tenía prisa en hacer la voluntad de Dios. Yo leí esto y me pregunte a mí mismo ¿cuán de prisa estoy por hacer la voluntad de Dios? Si queremos ser como Cristo, necesitamos entonces tener prisa por hacer la voluntad de Dios. Jesús sabía que él tenía que ser crucificado y morir a su vez cuando el cordero de pascua fuese asesinado y por ello le dijo a Judas "lo que estás haciendo, hazlo más rápido" por lo que Judas salió a conspirar con los sacerdotes.

Entonces arrestaron a Jesús esa misma noche, y como Jesús atravesó ese proceso de ser torturado (lo cual contó a todos anteriormente) él se mantuvo bajo el control. No fue como si ellos le hubiesen puesto una capucha en su cabeza y comenzaran a pegarle en la cara y gritarle "la profecía esta de nuestro lado, Cristo, ¿Sabes quién te golpeó?" No parecía como si él estuviese bajo control pero puedo asegurarles que lo estaba. No fueron los sacerdotes o los otros hombres en esa habitación quienes tenían el control, fue Jesús quien estaba controlando la situación.

Tú y yo podemos estar bajo el control de nuestras vidas también. Tomará cada fibra de tu ser mantenerte controlado ante la presencia de un mundo maligno y ausente de Dios, pero con Dios y el ejemplo de Jesús puede llevarse a cabo. Tú y yo podemos hacerlo.

Jesús estaba colgando de la cruz y dijo las primeras palabras del salmo 22, "Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has desamparado?" pero ¿quiso decir él que realmente había sido desamparado? ¡De ninguna manera!

En esta parte es donde él estaba en el jardín de Getsemaní cuando fue arrestado:

Mateo 26:50-54
(50) Y Jesús le dijo: Amigo, ¿a qué vienes? Entonces se acercaron y echaron mano a Jesús, y le prendieron.
(51) Pero uno de los que estaban con Jesús, extendiendo la mano, sacó su espada, e hiriendo a un siervo del sumo sacerdote, le quitó la oreja.
(52) Entonces Jesús le dijo: "Vuelve tu espada a su lugar;" " porque todos los que tomen espada, a espada perecerán.
(53) ¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles?
(54) ¿Pero cómo entonces se cumplirían las Escrituras, de que es necesario que así se haga?

Cristo no fue abandonado por Dios.

En Juan 16:32, Jesús estaba hablando en el Jardín de Getsemaní a sus apóstoles.

Juan 16:32
He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo; mas no estoy solo, porque el Padre está conmigo.

Jesús creía que su Padre estuvo con él siempre.

¿Cómo fue que Jesús estaba tan enterado de que todos iban a dejarlo solo aunque juraran al cielo y a la tierra "nosotros jamás te abandonaremos"? Él lo sabía porque ya lo había dicho cientos de años atrás el profeta Zacarías.

La profecía mesiánica de Zacarías 13:7, fue "Hiere al pastor, y serán dispersadas las ovejas" y Jesús sabía que lo que Zacarías había dicho era correcto y por ello dijo seréis esparcidos cada uno a su sitio y me dejaréis solo" y desde luego todos lo hicieron.

Ahora, me gustaría ir al Salmo 22, y vamos a ir y a venir a través de los evangelios y veremos que ya el salmo 22, retrata la crucifixión con un lenguaje muy claro.

Jesucristo estaba bajo control en esa cruz, y estaba haciendo el acto de amor más grande que podía hacer por aquellos alrededor de él. Casi, 900 años antes de esto, Dios hizo que David escribiese las palabras del salmo 22, que hablan tan claramente de la crucifixión que es difícil creer que nadie las hubiese pasado por alto. Jesús en la forma más poderosa sabía que una vez más estaba buscando a la gente y diciendo, "mírenme soy el Mesías"

Salmos 22:1
Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?

Muchos salmos comienzan de esta manera con sentimientos muy humanos (emociones). Hay muchos momentos en los que hablamos de esta manera cuando no estamos realmente desamparados. Algo realmente malo ocurre y entonces decimos "¿Dios donde estas, acaso ya no estas más en mi vida, nunca más estarás para mí? Lo que haces en ese momento es sencillamente expresar emociones, sentimientos y frustración.

Los salmos son así. ¿Por qué los salmos han sido tan accesibles a tanta gente a través de los siglos? Porque se expresan en términos muy humanos y con gran precisión como nos sentimos y como pensamos cuando las cosas se tornan duras para nosotros. Yo puedo ver cómo fueron las circunstancias por las que pasaba David cuando escribió 'Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?'

Hay muchos salmos que comienzan de esta manera:

Salmos 10:1
¿Por qué estás lejos, oh Jehová, Y te escondes en el tiempo de la tribulación?
Salmos 13:1
¿Hasta cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí?

Ésta es una hermosa toma de ejemplo de las emociones humanas, de cómo nos sentimos realmente, cuando internamente y realmente sabemos que esto no es realmente así y que no hemos sido abandonados.

El salmo 22, es un salmo de David que pudo haber sido escrito más de 900 años antes de la crucifixión.

Salmos 22:1-6
(1) Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor?
(2) Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y de noche, y no hay para mí reposo.
(3) Pero tú eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel.
(4) En ti esperaron nuestros padres; Esperaron, y tú los libraste.
(5) Clamaron a ti, y fueron librados; Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.
(6) Mas yo soy gusano, y no hombre; Oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.

Hay algo implícito aquí en hebreo que no vemos en español, y para verlo debemos acercarnos a esta palabra 'gusano'

Éxodo 25, habla acerca del tabernáculo y su construcción así como de sus materiales.

Éxodo 25: 4
azul, púrpura, carmesí, lino fino, pelo de cabras,

La palabra "gusano" en el salmo 22, y "carmesí" aquí en éxodo 25, son la misma palabra hebrea. Algunas veces cuando es traducida puede referirse al color o al gusano que era usado para sacar el tinte carmesí o escarlata.

Jesús estaba de color purpura, había sido golpeado fuertemente, había sido arrestado la noche del lunes y llevado ante Anás, luego al siguiente día ante Caifás y el Sanedrín. Se burlan de él y es llevado a Pilato. Pilato le hizo preguntas y lo envió ante Herodes. Herodes también lo interrogó y sus soldados se burlaron, entonces volvió donde Pilato. Ya eran las doce del mediodía y Pilato le preguntó a la multitud que querían hacer con Jesús. La multitud gritaba diciendo: "¡crucifíquenlo, crucifíquenlo!" Ya era mediodía y no iban a crucificarlo ese día, así que Pilato lo entregó a sus hombres. Ellos lo apalearon y azotaron durante la tarde y la noche y lo crucificaron a las 9:00 de la mañana.

Había sido golpeado toda la noche, tenía una corona de espinas inserta en su cabeza, había sido azotado una y otra vez, todo su cuerpo estaba de color carmesí porque estaba cubierto de sangre seca. Novecientos años antes que Jesús colgase de la cruz, color carmesí y desfigurado, el salmo 22, fue escrito.

El salmista escribió por revelación:

Salmos 22:6-8
(6) Mas yo soy gusano [estoy carmesí], y no hombre; Oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.
(7) Todos los que me ven me escarnecen; Estiran la boca, menean la cabeza, diciendo:
(8) "Se encomendó a Jehová; líbrele él; Sálvele, puesto que en él se complacía."

Estas palabras fueron tan cercanas a lo que los escribas, fariseos y otros dijeron, que es sorprendente que Dios pueda incluso darlas a través de una revelación desde hacía tanto tiempo.

Mateo 27:41-43
(41) De esta manera también los principales sacerdotes, escarneciéndole con los escribas y los fariseos y los ancianos, decían:
(42) "A otros salvó," "a sí mismo no se puede salvar; si es ¡el Rey de Israel!, descienda ahora de la cruz, y creeremos en él.
(43) Confió en Dios; líbrele ahora si le quiere; porque ha dicho: 'Soy Hijo de Dios'."

Lo que David dijo por revelación que dirían los burlones fue exactamente lo mismo que 900 años más tarde dijeron cuando Cristo pendía de la cruz.

Salmos 22: 9
Pero tú eres el que me sacó del vientre; El que me hizo estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre.

Dios estaba preparando al mesías incluso desde que el mesías era niño, preparando a la gente alrededor de él para hacerle saber lo que estaba haciendo y quien era él.

Salmos 22:10 y 11
(10)Sobre ti fui echado desde antes de nacer; Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios.
(11) No te alejes de mí, porque la angustia está cerca; Porque no hay quien ayude.

Tú no hablas con Dios y dices "no te alejes de mí" si ya crees que él te ha abandonado.

Jesús jamás creyó que Dios lo hubiese abandonado.

Nadie está cerca de él, los apóstoles se esparcieron, el pastor fue atacado, y las ovejas estaban dispersas.

El versículo 11 dice que no hay quien ayude, y no lo hubo, Jesús estaba por su cuenta y con Dios.

Salmos 22:12
Me han rodeado muchos toros; Fuertes toros de Basán me han cercado.

¿Por qué dice Basan? Si vas a Israel, las más grandes, las mejores, las más bellas y fuertes reces son de un área llamada Basan. Estas son poderosos animales, y así eran exactamente los romanos, poderosos soldados. Ellos tenían el poder sobre el mundo de aquel momento.

Salmos 22:14
He sido derramado como aguas...

Jesús tenía muchas heridas y sangraba por doquier.

Salmos 22:14
...Y todos mis huesos se descoyuntaron;

Que profecía tan fenomenal para completar el sacrificio de Cristo. Atrás en Éxodo capítulo 12, está escrito que "ningún hueso será roto." Ninguno de los huesos del Mesías fue quebrado. Estuvieron fuera de sus coyunturas pero no fueron quebrados.

Juan 19: 36
Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura: "No será quebrado hueso suyo."

Los soldados romanos rompieron las piernas de los hombres que estuvieron colgando en las cruces alrededor de Jesús, pero no quebraron las piernas de Jesús porque ya había muerto, y no rompieron sus huesos porque la profecía dice que ningún hueso del Mesías seria quebrado. Esto es un milagro si nos detenemos a pensar como fue golpeado, apaleado y azotado.

Salmos 22: 15
Como un tiesto se secó mi vigor, Y mi lengua se pegó a mi paladar,
Y me has puesto en el polvo de la muerte.

Es sorprendente que Cristo tuviese la fe de mantenerse dentro de la voluntad de Dios y estuviese en control mental y supiese que "ninguno de mis huesos van a ser quebrados".

En este momento eran las 3:00 de la tarde, Jesús no tenía gran fuerza física por gastar. Él estaba literalmente viviendo de la fe.

"Y mi lengua se pegó a mi paladar"- Jesús estaba muy deshidratado. Él estuvo despierto todo el día lunes. Fue arrestado la noche del lunes y golpeado. El martes fue y volvió de las manos de Herodes a las de Pilato. Entonces, estuvo despierto todo el martes, el martes en la noche fue golpeado por los soldados. Para la mañana del miércoles fue crucificado y aquí el miércoles en la tarde todavía estaba colgando de la cruz. Así que probablemente estuvo despierto desde el lunes hasta el miércoles, había estado despierto por 48 o 50 horas, estuvo sangrando por horas y horas y horas. Estaba completamente deshidratado, y su lengua estaba seca. Por eso es que no pudo enunciar con claridad "Eli, Eli, lama sabactani," y los burlones dijeron "oh está llamando a Elías"

Salmos 22:16
Porque perros me han rodeado; me ha cercado cuadrilla de malignos; horadaron mis manos y mis pies.

El nombre que se les daba a los gentiles era "perros", y esa fue exactamente la forma en que Jesús llamó a los gentiles: perros.

Horadaron mis manos y pies. Esta es una sentencia fenomenal porque las personas no eran crucificadas en los tiempos de David. La crucifixión no fue inventada sino hasta los romanos. Los asirios tenían una forma de crucifixión pero lo que hacían era clavarte en una estaca. No te clavaban a ella ni te ataban a ella.

La crucifixión como sabemos en los cuatro evangelios no existió sino hasta el imperio romano. Sin embargo más de 900 años antes de que el Mesías fuese crucificado, David escribía por inspiración "horadaron mis manos y pies"

Cuanta precisión hayamos en las revelaciones de Dios. ¡Como las cosas que están escritas en la biblia llegan a ocurrir, es un hecho fenomenal!

Piensa acerca de las personas que pudieron ver esto que se llevara a cabo justo frente a ellos, frente a la cruz. De cómo empezaran a pensar y recordar el salmo 22: "uhm Veamos, él está carmesí, siempre ha amado a Dios, está rodeado por toros, su fuerza se ha agotado, su lengua está pegada a su paladar, sus manos y sus pies han sido horadados..."

Salmos 22:17 y 18
(17)Contar puedo todos mis huesos; Entre tanto, ellos me miran y me observan.
(18)Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes.
Mateo 27:35
Y después que le hubieron crucificado, repartieron entre sí sus ropas, echando suertes.
Salmos 22:19-22
(19) Mas tú, Jehová, no te alejes; Fortaleza mía, apresúrate a socorrerme.
(20)Libra de la espada mi alma, Del poder del perro mi vida.
(21)Sálvame de la boca del león, Y líbrame de los cuernos de los búfalos.
(22)Anunciaré tu nombre a mis hermanos; En medio de la congregación te alabaré.

Después que Jesús fuese resucitado de entre los muertos, él se levantó y declaró el nombre de Dios.

Hebreos 2:11 y 12
(11) Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos,
(12) diciendo: "Anunciaré a mis hermanos tu nombre, En medio de la congregación te alabaré."
Salmos 22:23-24
(23)Los que teméis a Jehová, alabadle; Glorificadle, descendencia toda de Jacob, Y temedle vosotros, descendencia toda de Israel.
(24)Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligido, Ni de él escondió su rostro; Sino que cuando clamó a él, le oyó.

¿Abandonó Dios a Jesús? De ninguna manera.

Dios escuchó el llanto de Jesús desde la multitud, escuchó cada palabra, monitoreó cada pensamiento y escuchó cada señal. Dios estuvo allí con Su hijo, el Mesías, en cada paso de su camino. Dios tuvo que llevar esto a cabo porque era la única manera de redimir legalmente a la humanidad. Jesucristo tenía que dar su vida por ti y por mí. El corazón de Dios estaba destrozado, pero él tenía que dejar a su hijo morir por ti y por mí-- ese es el amor de nuestro Padre.

Salmos 22:25-31
(25) De ti será mi alabanza en la gran congregación; Mis votos pagaré delante de los que le temen.
(26)Comerán los humildes, y serán saciados; Alabarán a Jehová los que le buscan; Vivirá vuestro corazón para siempre.
(27)Se acordarán, y se volverán a Jehová todos los confines de la tierra,
Y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti.
(28)Porque de Jehová es el reino, Y él regirá las naciones.
(29)Comerán y adorarán todos los poderosos de la tierra; Se postrarán delante de él todos los que descienden al polvo, Aun el que no puede conservar la vida a su propia alma.
(30)La posteridad le servirá; Esto será contado de Jehová hasta la postrera generación.
(31)Vendrán, y anunciarán su justicia; A pueblo no nacido aún, anunciarán que él hizo esto.

En las palabras: "Él hizo esto" en arameo se dice "consumado es"[1]

Y eso es lo que Jesús hizo en la cruz hace 2000 años. Él no fue la gran víctima. Estuvo siempre bajo control y sabía porque estaba allí. De acuerdo con el Evangelio de Juan (Juan 19:28-30), cuando él supo que todo había sido llevado a cabo, cuando supo que podía morir, y que no había ninguna otra escritura que tuviese que ser cumplida, cuando supo que su muerte completaría nuestra redención, él dijo "consumado es". En ese momento, el entrego su espíritu por nosotros. El sacrifico su vida como el cordero de pascua por nosotros.

Aquí es donde Jesús en la cruz con mucho dolor, siendo burlado, siendo despreciado y crucificado con criminales y que a pesar de haber habido tantas cosas que pudo haber dicho, su amor por el compromiso era tan fuerte que citó el principio y el fin del salmo 22. ¡Es sorprendente, es maravilloso!

Que gran ejemplo de vida para mí y de esperanza para ti. Todo ese tiempo en el que pudo haberse rendido lo pasó allí colgando en la cruz. Todo lo que pudo haber pensado fue "me pregunto cuanta gente me creería si realmente pudiesen entender lo que estoy haciendo aquí". Dios en Su plan redentor, y Su sabiduría, hizo que David escribiese el salmo 22, pensó "Mi hijo podrá ser capaz de traer a la gente hacia mí a través de este salmo, incluso si muriese por ellos."

Las Escrituras no nos dicen si hubo alguien entre la multitud ese día que hiciese la conexión entre lo que Jesús dijo y el salmo 22. Yo espero que alguno lo haya hecho. Yo ciertamente tengo esperanza que como el cristianismo se propagó y hombres y mujeres de Dios, poderosos predicadores como Pablo, Apolo, Bernabé, Pedro, los apóstoles, alguna de las mujeres que son mencionadas en Filipenses capítulo 4 (Evodia y a Síntique) hayan hablado a la gente acerca del salmo 22. Con suerte, cuando la gente fuese ante ellos y preguntasen "¿cómo saben que este tipo, Jesús, era el Mesías? Ellos hubiesen abierto el salmo 22, y leído, y les hubiesen dicho "¿pudo haberse referido a alguien más?

Tengo confianza en que hombres y mujeres que hayan sido traídos hacia la familia de Dios porque alguien compartió con ellos el salmo 22, cuando dudaron de si fue Jesús o no realmente el Mesías.

No puedo imaginar que el salmo 22, se refiera a alguien más.

Así que aprendamos una lección de Jesús, y caminemos con el control de nuestra vida. Sabiendo lo que está ocurriendo alrededor de nosotros, y sabiendo lo que estamos haciendo, y porque lo estamos haciendo. Todos somos capaces de ir con nuestro padre y hacer Su voluntad, predicar Su palabra, y hacer lo mejor para que otros se sumen a la familia de Dios.

[1] Psalm 22:31 Trad. Names of God Bible (NOG): "Le dirán a la gente que aún no ha nacido acerca de su justicia: que lo ha terminado."